NEMO

Nemo llegó. Y por cierto, vaya nombre para una tormenta de nieve!  Pero no se pudo bromear mucho con el tema porque,  como las cosas no podían ser tan sencillas como “va a nevar mucho, no salgamos de casa” tuvo que coincidir con la fiesta de cumpleaños de mi HK mayor, a así que el tema nieve no era gracioso para nadie.

 La noche anterior en mi casa la tensión se podía palpar en el ambiente: mi HM todo el dia enchufada a cualquier aparato que la informase sobre el tiempo atmosférico, con el teléfono pegado en un lado y mi niña pegada en el otro “no lo canceles por favor, no lo canceles!” y la cosa no pintaba nada bien. Esa noche nos fuimos a la cama aun sin saber que sucedería. En las noticias decían que la tormenta empezaría después de las seis, asi que a lo mejor aun se podía salvar el cumpleaños si lo adelantaban unas horas. Todo se vería a la mañana siguiente.

Y a la mañana siguiente…

Estaban cayendo unos copos de nieve como mi puño de gordos. Mi HM no paraba de repetir “no vamos a poder hacerlo, no vamos a poder hacerlo” mientras buscaba en el ordenador y la televisión a la vez  información sobre Nemo. Mi HD trataba de explicarle a mi HK que a veces estas cosas pasan y si no se puede no se puede y mi HK gritaba “todo el mundo en mi clase me va a odiaaaar” Entonces mi HM se despegó de la información atmosférica, intentó hablar con mi niña y después de que la niña repitiese su frase como ocho veces, y dijese que la daba igual que la gente después no pudiera volver a sus casas o que alguien tuviese un accidente, o que el mundo se acabase justo después de su fiesta que lo que quería era la fiesta y punto, justo después, mi HM tuvo un momento de desesperación y medio llorando (cuando digo que hubo drama, es que hubo drama) decidió que iba a hablar con todos los padres, que a lo mejor la fiesta podía hacerse.

Y se hizo. Afortunadamente. Y fue un éxito.

La parte mala de la fiesta fue que trabaje mogollon porque con la tormenta la housekeeper no pudo llegar asi que tuve que ordenar toda la casa, y fregar los cacharros de la cena y el desayuno, además de todos los preparativos de la fiesta, mientras mi HM compraba las dos tartas (una gluten free porque mi niña es celiaca) globos y otras cosillas.

La parte buena fue que me encantó lo que hicieron. Vinieron unos actores e hicieron una cosa muy original con las niñas, me lo pasé bien hasta yo, que no participaba xD

Y bueno, luego vinieron todos los padres y se llevaron a las niñas y todos pudieron llegar a sus casas sin incidentes porque lo gordo de la tormenta empezó por la noche.

¿Os cuento la parte menos dramática de la tormenta?

Nueva York estaba precioso, Central Park completamente nevado, los niños tirándose con los trineos, la gente con los skies (como os lo cuento), los perros correteando felices entre la nieve… Mari se vino en cuanto pudo coger un tren (porque en principio se paralizó todo) y bueno, el sábado ya era de noche cuando ella llegó, así que no vimos demasiada nieve, fuimos a cenar al Mc Gee´s bar, que está supuestamente inspirado en el Mc Laren de “Como concí a vuestra madre” pero que en realidad no se parece en nada jeje, y  al dia siguiente nos recorrimos central park haciendo millones de fotos.  Aquí la gente lo ve como muy normal, pero cuando vienes de una ciudad en la que cuando una noche caen tres copos de nieve toda tu familia te despierta gritando ¡está nevando, está nevando! Y os reunís todos frente a la ventana con cara de bobos e incluso cámaras de  fotos para capturar el momento, entonces esto te parece una pasada.